Reclamo de docentes ante la suspensión de clases

Mediante un comunicado, la Jefatura ratificó su criterio de “garantizar la apertura y funcionamiento de todos los establecimientos escolares sin dictado de clases” hasta el 31 de marzo. Eso implica que el personal directivo, docente y auxiliares no docentes deben “llevar adelante actividades pedagógicas, tareas administrativas y de higiene, garantizando a la continuidad la prestación alimentaria”.

Sin embargo este “espíritu (que) apunta a minimizar lo más posible la circulación de las personas, incluidos docentes y auxiliares, estableciendo guardias rotativas para todos los trabajadores no comprendidos en el grupo de riesgo”, fue motivo de rechazo por parte del gremio Suteba. Es por ello que anunciaron que presentarán una impugnación por “el resguardo de la salud de los trabajadores de la educación”.

Es que según entienden, la medida “no guarda congruencia con el resto de la normativa provincial y nacional, en referencia a la pandemia que estamos sufriendo con el COVID-19 y la epidemia de dengue tanto en el país como en la provincia de Buenos Aires. Y apuntaron al concepto de “guardias mínimas”, señalando que “pretender que los docentes y auxiliares asistan normalmente atenta contra el objetivo de impedir la propagación de la pandemia”.