Para Santilli, se lesionó el diálogo entre Ciudad y Nación

“Te da bronca”, admitió Diego Santilli, vicejefe de Gobierno porteño a cargo de la seguridad de la Ciudad, en alusión a la decisión del presidente Alberto Fernández de quitarle un 1,18% de coparticipación a su distrito en medio de la pandemia para reasignar esos recursos al aumento de sueldo que recibirá la Policía Bonaerense. Frente a esta determinación, a la que calificó de “arbitraria” e “inconstitucional”, Santilli no tuvo reparos al describir cómo quedó el vínculo con la Casa Rosada: “El diálogo entre Larreta y el Presidente está lesionado pero hay que seguir trabajando porque estamos en una pandemia”.

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Tras el anuncio oficial, la Ciudad dejará de recibir unos $13.000 millones para lo que resta del año y unos $50.000 para el 2021; sumado a la caída de la recaudación que ya venía sufriendo desde marzo por los efectos que trajo el coronavirus en la actividad comercial e industrial. “La pandemia nos generó una caída del 13% de los ingresos. Estamos hablando de unos $37 mil millones de pesos. Además, tuvimos que invertir en términos de salud unos $20 mil millones y ahora un porcentaje de tus ingresos se ven quitados de la noche a la mañana del presupuesto de la ciudad”, explicó Santilli a Radio Mitre. Y agregó: “Eso hace que a una ciudad que viene con una planificación y trabajo constante y profesional todos los días, se le haga difícil trabajar”.

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“Fue improvisado porque en el medio de una pandemia, donde los recursos se caen y las inversiones tienen que aumentar en materia de salud, no se puede afrontar este tipo de caídas (en el presupuesto)”, enfatizó. Y recordó que la Ciudad ya había hecho una primera reestructuración en mayo con la suspensión de obras para afrontar los $20 mil millones que tuvieron que destinarse al sector de la salud. “Ahora este nuevo impacto te hace replantearte todo”, remarcó.

Más allá de que el diálogo entre el jefe de Gobierno y el Presidente esté lesionado, los colaboradores de Larreta destacan que es un “apologista de la moderación” y que no va a romper el diálogo con la Casa Rosada. Sí va a marcar distancia, aunque va a sostener su compromiso con la administración de la crisis sanitaria en torno al coronavirus.